DÍA 1

 

En este primer día llegamos desde Helsinki a Kaitaan Koulu, el centro donde tendrá lugar nuestra observación en la localidad de Espoo. Este breve viaje de 20 minutos en autobús nos sirve para empezar a experimentar el ritmo de vida finlandés, relajado y sin masificaciones.

Encontramos el centro sin dificultad, aunque la puerta principal es más difícil de localizar, quizá porque esperábamos encontrar una valla con una puerta de acceso rodeando el centro y no es el caso. A la puerta nos esperan Maija y Kukka, que nos invitan a explorar un poco el centro por dentro. Nuestra impresión es muy positiva. Es un lugar agradable, espacioso y luminoso, con abundantes zonas que invitan al relax. Gran parte de la decoración en clases y pasillos es obra de los alumnos, claramente producto de su trabajo en clase de Arte y otras materias. El mobiliario nos parece actual, aunque más tarde descubriremos que los alumnos lo consideran un poco anticuado respecto a otras escuelas de la región.

La primera clase que visitamos es de Biología. La decoración del aula es especialmente llamativa, con multitud de objetos que invitan a descubrir, a aprender. Un esqueleto nos saluda a la entrada, hay animales disecados e incluso una jaula donde descansa la mascota de la clase, un pequeño insecto palo que ayuda a los alumnos a acercarse a la naturaleza y a promover su bienestar. La distribución de los pupitres en isletas facilita la cooperación entre alumnos. Se trata de un aula realmente espaciosa y, además, la ratio de alumnos no muy alta, son menos de 20. Intercambiamos preguntas con los alumnos, que responden nuestras dudas sobre su sistema y también tienen curiosidad por saber del nuestro. Vemos que levantan pacientemente la mano hasta que se les da el turno de palabra, en un ambiente de respeto muy agradable.

En la siguiente clase conocemos al grupo de estudiantes extranjeros que cursan un año de preparación para poder seguir las clases en finés. Se enfatiza la adquisición de la lengua de una forma natural. Son chicos y chicas de diversos países, no todos ellos hablan inglés y aprender finés es crucial para ellos. La clase es de Educación Física y la profesora usa apoyos visuales, así como una asistente para asegurarse de que los alumnos puedan seguir sus explicaciones. Hoy toca jugar a baseball finlandés, la sesión se desarrolla en el exterior y los alumnos participan con ganas. En todo momento nos acompañan “alumnos guía” que se han ofrecido voluntarios y nos explican las actividades que se desarrollan en las clases. Nos sorprende lo rápido que aprenden una lengua considerada extremamente compleja.

Tras esta sesión volvemos a la clase de Biología donde la profesora cambia su plan inicial para la sesión al proponer un alumno que quiere repasar geografía. Nos sorprende, y nos comentan que la flexibilidad es muy importante en su sistema. La profesora usa Kahoot para repasar los países del mundo. La mayoría de los alumnos parecen disfrutar el juego y comentan que lo usan habitualmente. Observamos que el uso del teléfono móvil en clase como instrumento para el aprendizaje es algo generalizado. Tras el juego, los alumnos aprenden sobre las formas de parar el cambio climático con una explicación de la profesora usando la pizarra digital como apoyo. Después la profesora les remite a un cuestionario en internet para verificar si sus hábitos son los correctos para contribuir a cuidar el medio ambiente.

Los aspectos más destacables en esta jornada son el ambiente de cooperación, respeto y confianza entre alumnos y profesores en el centro, así como la ausencia de estrés.

 

DÍA 2

 

Hoy hemos asistido a una presentación por parte de la directora del centro acerca del sistema educativo finlandés. Por supuesto, en una breve exposición no es posible descubrir todo lo que nos gustaría sobre su sistema, paradigma para muchos, pero podemos apreciar cuáles son algunos de sus pilares. Entre ellos, el alumno como centro del aprendizaje. El sistema es muy flexible y trata de adaptarse a los alumnos lo máximo posible. Se promueve la autonomía del alumno, para ello se le dan responsabilidades depositando total confianza en su capacidad.

El bienestar del alumno se considera fundamental. Se tienen en cuenta sus intereses. El descanso es esencial para su rendimiento y se les permite descansar a menudo para poder asimilar lo que trabajan en clase.

En Kaitaa se promueve la cooperación entre iguales, así como entre alumno y profesor. Se intenta crear una comunidad donde los estudiantes se sientan a gusto y seguros de forma que tengan la confianza suficiente para pedir ayuda cuando sea necesario.

En una sesión de preguntas tras la exposición de la directora nos hablan de diferentes temas tales como la carga lectiva de los profesores, el acceso a la función docente, el calendario escolar, la disponibilidad de material escolar gratuito… Parece claro que en el sistema prima una rigurosa elección de los docentes y el bienestar del alumno.

Una de las cosas que se mencionan en la presentación es el porcentaje de asignaturas optativas, más del 25%. Más tarde tenemos la posibilidad de visitar algunas clases de esas asignaturas y descubrimos como los alumnos aprenden sobre materias tales como arte, costura, economía doméstica y carpintería. Los estudiantes nos comentan que en otros centros tienen incluso más opciones. Todas estas clases son de carácter eminentemente práctico y los alumnos aprenden “haciendo” cosas, no sólo escuchando al profesor. Las instalaciones y materiales de los que disponen los alumnos les permiten desarrollar esas destrezas prácticas.

 

DÍA 3

 

En nuestro tercer día acompañamos a los alumnos de séptimo curso durante su jornada. Comienzan con una sesión de arte. Nos llama la atención como cada alumno trabaja en cosas diferentes.  Mientras unos hacen una gymkhana usando una aplicación online (Seppo) sobre Surrealismo por todo el centro (incluso en el exterior), otros trabajan con maquetas o mosaicos en el aula.

La siguiente es una sesión combinada de Biología y Educación Física que tiene lugar en el exterior.  La profesora propone una actividad que consiste en seguir una senda en el bosque cercano en busca de diferentes elementos naturales que han de tachar en una hoja a modo de bingo. Los alumnos deben tomar una foto de dichos elementos para luego compartirla a través de Padlet. Nos llama la atención la libertad que se da al alumno en dicha salida.

Más tarde volvemos a visitar una clase de asignaturas optativas. Esta vez visitamos la clase de Economía Doméstica, donde están aprendiendo a cocinar una hamburguesa. Cuando llegamos están calentando el horno para cocer los bollos.

Finalmente, acudimos a la clase de Biología, donde la profesora está introduciendo un proyecto que se extenderá hasta el año siguiente y revisan con la profesora el Padlet de la clase de Educación Física.

La jornada de clases ha sido variada y con actividades prácticas en su mayor parte, utilizando elementos como la naturaleza y tecnología para introducir los contenidos en algunos casos. Para terminar, asistimos a una de las reuniones del claustro de profesores. Es una reunión informal donde realizamos una dinámica de grupo para promover las buenas relaciones entre todos.

 

DÍA 4

 

Hoy comenzamos nuestra jornada asistiendo a clases donde los alumnos hacen actividades como parte del Programa de Escuelas Asociadas a la Unesco. El principal objetivo de este Programa es el de seguir los principios que marca la Unesco relacionados con temas como la cultura, la paz, los derechos humanos, la igualdad entre las personas y el medio ambiente. Visitamos una clase de Carpintería donde los alumnos han diseñado y creado con diversos materiales juegos relacionados con lugares considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Nos impresiona mucho su creatividad.

Nuestra siguiente sesión es especialmente interesante. Es una clase de Finés que se desarrolla en la biblioteca. Una vez más, podemos constatar la libertad que se da al alumno. El espacio tiene diversos tipos de asiento, sillas y mesas altas, sillones y mesas bajas. Los alumnos se acomodan a su gusto y siguen la clase en silencio acompañados por un perro, la mascota de la profesora. Algunos lo acarician durante la clase y nos comentan cómo la presencia del animal les ayuda a reducir el estrés y a concentrarse. Varios estudiantes usan su móvil durante la clase, no se les llama la atención. La profesora deposita su confianza en ellos, asumiendo que lo usan para fines educativos. Se presentan los contenidos combinando la pizarra digital y la tradicional como soportes visuales.

Asistimos también a una clase de Finés para los alumnos extranjeros en su año preparatorio. Nos sorprende la gran autonomía de los alumnos, que trabajan de forma individual y en parejas sin casi asistencia de la profesora. Además, tienen libertad para trabajar según sus necesidades con libros tradicionales en papel o con aplicaciones en el ordenador. Todos saben qué tareas deben hacer y las desarrollan a su ritmo. Los alumnos que deciden no trabajar en el ordenador en ese momento, se sientan con el profesor alrededor de una gran mesa donde pueden solicitar ayuda del resto fácilmente.

De nuevo hemos podido observar como la autonomía del alumno y la flexibilidad son consideradas fundamentales en todas las clases.

 

DÍA 5

En nuestro último día visitamos una clase de Alemán como lengua extranjera. Es una clase desarrollada de forma bastante tradicional, donde se usa la pizarra digital para mostrar los ejercicios del libro que los alumnos deben completar. La profesora usa finés para hacer aclaraciones, aunque la mayor parte de la clase es en alemán. Los alumnos utilizan unas tarjetas para hacer un ejercicio oral donde trabajan el uso de formas de cortesía. En esta clase están sólo 6 alumnos, lo cual hace muy fácil la participación y el seguimiento individual de todos ellos.

Más tarde visitamos diversas clases donde los alumnos completan diversos retos para ganar una pegatina hasta completar una hoja que se les ha proporcionado. Estas actividades son parte de la celebración de Vappu, la fiesta nacional que celebra la llegada de la primavera. Todos corren de una clase a otra completando pruebas con entusiasmo, muchos de ellos y también algunos profesores se han disfrazado o llevan algún complemento divertido siguiendo la tradición.

Nos vamos del centro con la misma impresión que tuvimos el primer día, es un sistema relajado y flexible que estimula la motivación intrínseca del alumno. Esa flexibilidad se refleja también en los diversos espacios de aprendizaje. Creemos así mismo que se intenta buscar un equilibrio entre la innovación y lo tradicional. Se emplean varias aplicaciones online en las clases y los alumnos usan plataformas virtuales para recibir información y hacer actividades, pero al mismo tiempo los alumnos utilizan libros y cuadernos tradicionales, así como material manipulativo.

Mi conclusión tras esta estancia de observación es que resulta evidente que en muchas ocasiones “menos es más”. Menos alumnos, más inclusión. Menos estrés, más capacidad de asimilación. Menos presión y exigencia, más motivación y autonomía. Menos tareas para casa, más tiempo para aprender otras destrezas. Menos tiempo dedicado a pruebas, más tiempo dedicado al aprendizaje. Menos competitividad, más éxito. La resta finlandesa suma.